Todo comportamiento es una forma de comunicación.

Muchos niños y jóvenes que presentan dificultades conductuales, incluidos los que presentan dificultades de interacción social, y/o emocionales, también presentan necesidades de habla, lenguaje y comunicación. Estas necesidades a menudo pasan desapercibidas porque el comportamiento puede enmascarar las dificultades de comunicación de un niño o joven.

El 81% de los niños con trastornos emocionales y del comportamiento tienen necesidades de comunicación significativas no identificadas.

Los niños con problemas de conducta persistentes y graves tienen aproximadamente tres veces más probabilidades de tener baja capacidad verbal que los niños con un bajo riesgo de tener problemas de conducta

Las Necesidades de comunicación, habla o lenguaje puede adoptar muchas formas, entre

ellas:

• Problemas para entender lo que dicen los demás: por ejemplo, entender instrucciones y entender cosas que no se les dicen directamente.

  
  

• Dificultades para explicar sus acciones con claridad: tales como tartamudez, mutismo selectivo, dificultad para encontrar las palabras adecuadas y problemas para construir oraciones o una narrativa clara, todo lo cual puede ser malinterpretado de manera negativa. Aquellos que dudan y revisan sus oraciones pueden ser vistos como mentirosos.

  
  

• No tener muchas palabras para expresar sentimientos: pueden tener dificultades para encontrar las palabras, que describan sus propios sentimientos, y les puede resultar difícil gestionar sus emociones y calmarse. Las habilidades lingüísticas también son necesarias para comprender nuestros propios pensamientos y sentimientos, y los de los demás.

  
  

• Dificultades con la comunicación social: por lo que no saben cómo unirse a una conversación de la manera correcta, pueden tener dificultades para comprende chistes, expresiones idiomáticas (por ejemplo, "contrólate") y sarcasmo, todos ellos importantes para la interacción social. También pueden tener dificultades para comprender las reglas de la conversación, incluyendo cómo reparar malentendidos cuando ocurren. Esto puede deberse en parte a un procesamiento lento, que lleva a que pierdan señales y significa que sus turnos están mal sincronizados.

Los riesgos de no apoyar las necesidades del habla, el lenguaje y la comunicación podría estar enmascarada por otras “etiquetas” o “diagnósticos”, como dificultades de aprendizaje.

"Es importante entender el comportamiento como comunicación"

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